Es una infección vírica, que afecta mayoritariamente a población pediátrica. Se transmite a través del agua y por contacto directo, por lo que muchas veces la fuente de contagio está en las piscinas.

Se manifiesta en forma de lesiones sobreelevadas brillantes. Son muy contagiosos, por lo que se pueden extender por toda la superficie corporal.

Existen diversas opciones terapéuticas: extracción mecánica, crioterapia, aplicación de productos tópicos como el hidróxido potásico, o la conducta expectante